TE VI Y TE SENTI EN UN SUEÑO.

La noche esta hermosa, el corcel color de luna llena nos llevaba, sentía la tristeza mía que me invadía, se sentía húmedo por lo que no salia de mis ojos, un llanto interior que fluía copiosamente pero solo los dos lo sentíamos. Hubiera humedecido la tierra por donde pasábamos, porque mi llanto era del tamaño de la inmensidad, lo alimentaban manantiales que convergían en un punto, donde no salían y hacían ríos turbulentos dentro de mi produciendo un gran dolor, porque las lagrimas que no salen duelen mas, porque no lavan el alma. Tantas ganas de abrazarte, de tenerte, pero ya estaba esa abismal distancia que pusiste entre nosotros y ya no me dejo acercarme a ti. El corcel color de luna llena seguía su paso, le pesaba seguir, pero tenia que llegar al lugar del adiós. Silencios que pesan se escuchaban, y la música entraba para llenar esos vacíos de palabras que se resistían a ser pronunciadas, ya no había mas que decir porque todo se había dicho. El Corcel color de luna llena no quería caminar ya, y el camino que se niega a existir porque sabia del adiós, pero el piso corría bajo sus pies a una gran velocidad. Un piano que describe la luna y te dice todo lo que de ella quieres saber, hermosas imágenes, voces que surgen a coro y miras lo que hay frente a ti que se mueve rápidamente hacia atrás, la distancia se reduce cada vez mas y la música fluye.Llegaste en tu corcel color de luna llena, te vi, nos vimos, subí y un beso, salimos en dirección a nuestro destino, en el que ahora estamos, una enorme distancia entre nosotros existe, caminaba por un camino incierto y lleno de dudas que se abría a su paso, ignoraba aun lo que podía suceder, aun mantenía una lucesita, una esperanza de que todo siguiera igual. Una noche te abrazaba y te besaba después de que solo fue un sueño, solo nuestras voces y la noche inmensa escuchaba con jubilo los cantos de amor de nuestros cuerpos y la culminación de los sueños de nuestras almas, vivíamos esos momentos hermosos. La música seguía sonando y el camino no se detenía, cada vez corría mas rápido, como si ahora tuviera mas prisa por el desenlace. Recuerdo la noche que estábamos juntos viendo al horizonte que ya la noche había borrado, porque era la hora de soñar, de ver mas allá de cada sol, tu voz, mi voz, nuestras voces hacían coro con las voces de la noche, los racimos de luces estaban mas cerca; así como se acercaban en la noche, así creaba un poderoso campo magnético cada vez mas fuerte y se acercaba a nosotros, te abrace, nos abrazamos, uníamos nuestros labios, y juntábamos nuestros cuerpos y las palabras fluían. Quisiera que todo fuera como al principio, ver tus ojitos de llenos de luz, tus sonrisa que me da vida, tu voz que acaricia a mi alma, quizá el día te aleja de mi, pero la noche siempre te trae a mi, así sera por siempre, porque la noche tiene ese encanto, nos acerca y nos vemos en donde por primera vez se vieron nuestras almas, en el mundo de los sueños y allí nos seguiremos viendo, porque mi amor deja de ser terrenal y vivirá por siempre allí, en ese lugar del infinito que habitan las almas.